lunes, 29 de septiembre de 2008

¿Es Ibarretxe un legítimo representante del Estado ó un sedicioso?

“Varios partidos políticos separatistas –todos legales- llevan persiguiendo la del fundamento de nuestra constitución y la partición en añicos del democrático.”

Lea el artículo publicado en la sección “Sin complejos” por Santiago Abascal en el Semanal Digital. Artículo muy acorde con la anterior entrada de este blog.

9 comentarios:

  1. ¿Estado? Yo creo que más sedicioso, serán cosas mías...

    Un saludo

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  2. Ibarreche es un caradura que quiere seguir chupando un buen sueldazo a costa del contribuyente.

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  3. Ibarreche es un sedicioso, un traidor infame sin escrúpulos; y Santiago Abascal uno de esos héroes vascos que sabe decir bien claramente y sin complejos la realidad. Un gran defensor de España y la libertad que siempre ofrece certeros artículos, muy atinados y verdades como puños, siempre incómodas para la corrección política pro-nazionalista, antiliberal por naturaleza, antiespañola por su odio visceral y liberticida o cuasi-criminal como lo demuestran las actitudes de cómplices que, con anuencia o aquiescencia, contribuyen a la enfermedad de la sociedas vascas sometida al nacionalismo de tipejos tan deplorables como Ibarreche.

    Ibarreche: un sedicioso. Abascal: un héroe.

    Más España y más libertad. Bien lo sabía María San Gil y personas como Santi contribuyen de forma espectacular a mantener encendida la llama de la esperanza y de la lucha por una libertad verdadera contra los más peligrosos enemigos de ésta y de sus cómplices donde el infame Ibarreche ocupa lugar destacado. Gran escrito de Santi. Muy buen artículo.

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  4. A Ibarreche lo han ingresado con una infección bucal... XD, si es que todos llevan su merecido, lo malo es que hay médicos obligados a curar a ciertos especímenes raros.

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  5. Miguel:
    Representante ordinario del Estado en la CAV, para eso lo pagamos.

    José Enrique:
    No es precisamente el sueldazo lo que nos preocupa del personaje.

    Anónimo:
    Totalmente de acuerdo.

    Si te dijera:
    La diferencia entre un malvado y un decente es el último no le desea mal al contrario, solo que se vaya a su casa.

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  6. Lo de Ibarreche es ya enfermizo. No se trata de la legítima petensión de un nacionalismo exacerbado con la sempiterna revindicación de secesión basada en la farsa de la autodeterminación que ya denunciara en un magnífico libro el propio Santiago Abascal, es que es una traición en toda regla a la legalidad constitucional que -paradojas de la vida- le permite ostentar el cargo que tiene en una autonomía de la que reniega, pero a la vez de la que se sirve, creando el caldo de cultivo de la forma más abyecta que va desde la manipulación histórica, social y cultural en el sistema educativo hasta la justificación del crimen de esa banda criminal a la que le unen componentes ideológicos basados en el odio a España, un odio visceral que le hace enfrentarse al Estado, llevándolo a los tribunales... ¡¡¡al Estado del que es uno de los representantes en una comunidad autónoma!!!, que no sólo es insólito, sino el mayor gesto de indencia antidemocrática, lógico por otra parte en la perversidad de los delirios ideológicos que componen en el ideario racista sabiniana adaptado a las circunstancias de las que se sirven para conculcar derechos, como el sistema que pretende imponer para desterrar el castellano como ya se hace en otras autonomías, pero más sangrante en la que está sometida al nacionalismo desde una Transición no hecha en el País Vasco o mal hecha por culpa de los que desprecian la esencia de la Carta Magna que siempre han ultrajado ante la pasividad de los diferentes gobiernos, que lejos de combatir los despropósitos nacionalistas (con la salvedad de Aznar, que estaba dispuesto a condenar a cualquier representante que se saltase la legalidad) insacaibles creyendo que iban a conseguir contenerlos en el caso de los más ingenuos o del provincianismo suarista, y en casos de oportunismo o incluso afinidad ideológica en el caso de los más perversos cuando los terroristas eran hombres de paz.

    Se ha dado oxígeno no sólo a una banda criminal, que siempre gozó (con las excepción antedicha) de las facilidades y atenciones gubernamentales, bien fuera negociando políticamente o haciéndola víctima y legitimando su discurso con el terrorismo estatal fuera de la legalidad, lo que siempre, de uno y otro modo, le ha dado fuerza, cuyo furto han recogido los avezados nacionalistas que tienen secuestrada la autonomía vasca, en un clima sin libertad, donde políticos con escolta se juegan la vida por algo tan elemental como una democracia occidental de corte liberal que en las provincias vascongadas no se respeta con el escarnio, mofa, y alegría de unos nacionalistas envalentonados que persisten en su línea de torpedear el marco de convivencia constitucional desde las más deplorables posiciones con continuas afrentas ya sea al Estado, a la Constitución o a las ultrajadas víctimas del terrorismo del que algunos se han servido y al que otros han complacido en diversos momentos de la historia política reciente de nuestro país que todavía está en deuda con los héroes de una región tan castigada que tiene como presidente autonómico a un déspota liberticida ebrio de dislates ideológicos que pretende imponer llegando a la más vil de las traiciones como un sedicioso que sólo anhela la destrucción del Estado que paradójicamente le mantiene y permite semejantes actuaciones que llevar a cabo lo que no es sino el mayor de los disparates al que muchos, en silencio o incluso con un aplauso mal disimulado, han contribuido para desgracia de todos.

    Muy bien lo explica Abascal en su artículo de El Semanal Digital y convendría que todos, especialmente lo que se dicen demócratas de su partido, aunque cada vez alguno parezca alejarse de las posturas genuinamente liberales que lo llevaron al poder, atendieran y prestaran atención a tan sabias palabras, que no lo son tanto por su capacidad intelectual, que también y es más que sobrada, huelga decirlo, sino por el conocimiento que da el ser protagonista y haber vivido en carnes propias lo que implica y significa aquella situación como bien la conocía y conoce María San Gil, gente comprometida con unos principios claros, inquebrantables y dignos de toda loa gracias a los que la clase política española, mediocre en su mayoría, consigue elevar la dignidad, y que muchas veces son los maltratados por tirios y troyanos, por propios y ajenos, y por eso se necesitan personas de la valía, pero sobre todo de calidad humana y categoría moral de Santiago Abascal cuya familia es el claro ejemplo de la lucha contra la barbarie terrorista y la defensa a ultranza de una España en Libertad. Gracias por hacerte eco de su artículo cuya difusión siempre es buena para todo aquel que no quiere rendirse y espera que cada vez se sumen más, por pocos que sean, especialmente en estos tiempos de relativismo irresponsable, nihilismo inexplicable, y sin embargo, mucho fundamentalismo de la llamada corección política que ha alimentado animales tan mortíferos como los que sostienen el "cotarro" nacionalista del País Vasco. Santiago, estamos contigo!!!

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  7. Al Ibarreche no necesariamente hay que desearle ningún mal, no sólo por supuesta caridad cristiana o por un buenismo exacerbado; simplemente porque se tiene la dignidad moral de la que él carece; aunque algunos entiendo no puedan reprimir malos deseos para tipejos y personajes tan abyectos como él. Pero, en efecto, bastaría con que dejase en libertad a los vascos, y dejase de oprimir con ese nacionalismo trasnochado, decimonónico, racista y tan dañino; lástima que haya muchos detrás dispuestos a seguir sus delirios ideológicos e imponerlos a tantos otros como se ha durante tantos años en esta vilipendiada España nuestra. Un auténtico desastre.

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  8. Evidentemente, indudablemente un SEDICIOSO, de la peor calaña además. Bravo por Santi. Verdades como puños.

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  9. Sin complejos, ¡bravo! Así se habla.

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