Mamá, quiero un sueldo

El futuro alcalde, mal llamado electo, Alfonso Polanco ha manifestado su intención de reducir las dedicaciones exclusivas del ayuntamiento. Las del equipo de gobierno pasarán de cinco a tres –si me pilla a mí dejo la del alcalde y punto– y a la oposición solo se la ofrecerá al actual alcalde, Heliodoro Gallego, pero que seguramente no la extenderá a cualquier otro si este la rechaza; a Izquierda Unida, con un solo concejal, ni se lo plantea y hace bien, añado yo.

Pero al camarada JanGas le parece muy mal. Resulta que, como su trabajo de maestro escuela le lleva mucho tiempo, no tendrá lo suficiente para sus labores de oposición. Sería la primera vez que IU hace una oposición digna de tal nombre, en Palencia. Ya que las propuestas perroflauticas que normalmente exhalan no nos las podemos tomar en serio.

Mucho pedir regeneración democrática, mucho estar con el movimiento 15-M –que seguro que les pilló por sorpresa–, mucho defender a los proletarios, mucho cristianismo de la teología de la liberación pero muy poco de San Benito. Al final es el rollo de siempre de los políticos en general y de la izquierda en especial; a vivir de la política, y a vivir bien.

Juan, sé que esto te importa una higa, pero si quieres ganarte mi respeto –mi voto no lo tendrás nunca– trabaja, haz una buena oposición –no le dejes a Polanco ni respirar–, gánate el sueldo y, después, recházale. Con esto quedarás como un señor, te veré como un regenerador y no como un perroflauta aseado. Con Dios.