Traición

Zapatero dejará la Moncloa sin haber llegado a enterarse que su enemigo nunca ha sido el PP, sino los terroristas de eta. Porque eta siempre ha sido la enemiga de los españoles, incluyendo a los socialistas. Otra cosa que no habrá aprendido, a pesar de estar dos legislaturas presidiendo el consejo de ministros, es que la derrota de los terroristas no es la mejor opción, sino la única.

Es estúpido pensar que te puedes llevar bien con unos ilegales sin salirte de la legalidad. Lo normal es que ellos te lleven a su terreno. Y eso es lo que le ha pasado al gobierno socialista con toda la infame negociación de las narices. Se juntaron con los “malos” y les arrastraron al “mal”. Porque la idea basura de que hay que subir al monte para coger a los “descarriados” y bajarlos al valle, no deja de ser una imbecilidad o una maldad. El que se quiera subir al monte, que lo haga, pero que viva con las mismas comodidades que la cabra montañesa y asumiendo su “cabronidad”.

El chivatazo a eta del bar Faisán es un elemento más de hasta donde llegó, y sigue llegando, el gobierno socialista de Zapatero para derrotar al PP con la ayuda de los terroristas. Por eso es tan importante estar el 5 a las 5, sobretodo para el PP, en Madrid. ¡No se enterán!

No sé si Antonio Camacho se inmolará, tal y como hizo Barrionuevo para salvar a González del GAL, pero aún haciéndolo –chupándose los años de cárcel que le toquen por colaboración con banda armada y revelación de secretos del Estado– Rubalcaba debe dimitir, y debe hacerlo ya. El ministro del interior ha defendido a capa y espada que de su ministerio no salió la llamada que alertó a los etarras, lo cual es falso. Esto es motivo suficiente para que el PP rompa toda relación con ese ministerio hasta que Zapatero nombre un nuevo ministro. Después vendrá el PP y les indultará sin reconocer el delito y sin pedir perdón, como exige la ley para pedir el indulto.

No sabemos quien explosionó los trenes de Atocha el 11-M, seguramente no fue eta, pero le ha venido como dios.