La ruta turuta

No me extraña que los socialistas caigan aún más, que el gobierno, en la intención de voto. Mientras los ciudadanos hemos asumido que son necesarias las reformas y los ajustes para salir de –y de paso aprovechar– esta crisis, los socialistas lo único que proponen es que gastemos más, sin decir de donde sacarlo, para fingir que el mantenimiento de la arcadia socialdemócrata aún es posible. Es más, lo que achacamos al gobierno es que no pongan en marcha todo el paquete de reformas de una vez, para purgar cuanto antes la enfermedad y así poder salir adelante.

En Palencia, la nueva secretaria provincial del PSOE –junto a sus chiguitos– no se le ha ocurrido otra cosa que realizar una ruta por los sitios donde considera que los ajustes afectarán negativamente a su funcionamiento. Empezó por el hospital público Río Carrión, donde el anterior alcalde, Heliodoro Gallego, –que allí estaba de cuerpo presente, porque lo que es de espíritu…– no hizo nada por conseguir los terrenos para su ampliación, cosa que el PP en menos de un año ya conseguido. Y digo yo, ¿a nadie se le ocurrió preguntar a Miriam Andrés si dará a luz en dicho hospital o, en cambio, lo hará en un privado de Asturias? Porque estos socialistas de boquilla son la leche, pero a la hora de la verdad, tararí que te vi.

La segunda parada la hicieron en el colegio público de Villada donde al año que viene dejarán de cursarse los dos primeros cursos de la ESO. Esto afectará a una docena de alumnos, que tendrán que coger un autobús todos los días a sus doce añitos para ir al instituto en una localidad cercana. Pobrecitos, así que para que unos papás puedan tener a sus adolescentes hijos en casita, tenemos que mantener todo un instituto en Villada. Que me digan donde hay que firmar que ahora mismo voy, es más, aprovecharé para dar un donativo para que a esos chavalotes nos les falten unas fiestas dignas de ellos. ¡No te fastidia!

Se rumorea –y no es coña– que los socialistas palentinos, en esta infernal ruta, van a ir a la Tejera para revindicar que se siga enterrando dinero en el palacio de congresos. Les veremos en la antigua cárcel pidiendo que se reedite la biblioteca de Alejandría y terminarán sobre las vías del tren exigiendo que se las hundan, esperemos que ese día no les pille un tren, que ya sería lo que les faltaba. En fin, más no se le puede pedir a la nueva secretaria provincial del PSOE y senadora palentina, es lo que da de sí. Lo malo es lo cara que nos sale.