miércoles, 29 de octubre de 2008

Zapatero no necesita ir a Washington

No entiendo esa perra que ha cogido Zapatero con ir a la supuesta cumbre de refundación del capitalismo. Todo el mundo sabe que no serán ni petit Sarkozy, ni la fracasada Merkel, ni lame duck Bush los que hallen el remedio a la crisis en que los neoliberales americanos nos han metido. La solución vendrá de manos del gran hombre, del hombre enviado por la providencia, el hombre que solucionó la crisis financiera europea, el hombre que nos ilumina desde la Moncloa, José Luís Rodríguez Zapatero.

Zapatero debería convocar su cumbre alternativa e invitar a todos aquellos que realmente puedan aportar ideas para fundar un nuevo capitalismo. Lideres como Rafael Correa, Hugo Chávez, Evo Morales, los hermanos Castro, Abás El Farsi, Kim Jong II y todo aquel que esté convencido que el futuro del capitalismo lo dejó perfectamente relatado Karl Marx.

Todas esas mentes preclaras, guiadas por la firme determinación del nuevo Mesías –Zapatero– nos sacarán de la esclavitud del mercado para llevarnos a la tierra prometida del intervencionismo. Y allí, bajo el manto protector del Padre–Estado viviremos felices, sin preocupaciones, sin responsabilidades. Vayamos, hermanos, todos juntos de la mano de nuestro guía. Dejémosle a él, que todo lo sabe, que todo lo puede, que nos lleve, sin demora, por la senda, que solo él conoce, hacia la tierra de las extensas praderas.

3 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo. Y muy acertados los enlaces. Tanto el del preclaro e iluminado Pepiño Blanco cuyo cuaderno de bitácora no me extrañaría que fuera de obligada lectura en las protosoviéticas clases de Educación para la Ciudadanía, y especialmente esas críticas neomarxistas, tan manidas por el populismo chavista, que se aplican sobre la libertad del individuo abanderando el rancio, fracasado -pero hoy resucitado por ZP y sus secuaces- intervencionismo, que es la receta que Míster Z, difundiendo los alardes intelectuales de Pepiño, quiere enseñar al mundo en compañía de esos "demócratas" que muy bien mencionadas desde los hermanos Castro a Chávez y Morales, e incluso al presidente iranóa ya que también era deseo de nuestro presidente la presencia árabe, ya que de todos es conocida su aversión a la cultura judeocristina y al legado católico español, pero su afición desmedida por el islamofascismo y sus prácticas sobre las que evita pronunciarse tanto como cuando le preguntan por la violación de los Derechos Humanos en el "paraíso" fidelista.

    ZP quiere ir a Washinngton para resucitar a Marx y toda la patulea liberticida, toda la caterva antiliberal tan próxima a lo que él llama socialdemocracia, pero que no es sino la mixtura de neomarxismo actualizado a la corección política de hogaño con la típica retórica progre de eufemismo y otros aditamentos y ornatos para que sean los gobiernos estatalistas quienes decidan por el ciudadano acabando con su libertad, y eliminando la responsabilidad inevitablemente ligada a la libertad individual que tantp aborrece la izquierda de hoy igual que la de ayer. Muy atinado también ese enlace a la definición del peronismo en la wikipedia que da una idea del caos populista de corte intervencionista cuasi-totalitario y sobre todo muy demagógico que pretende reinventar ZP, motivo por que tantos deseos tiene de acudir a esa cumbre donde vuelve a presentarse igual que sus homólogos venezolano o boliviano como el mesiánico salvador, un combatiente a los ché guevara del s.XXI que enterrará el salvaje capitalismo para aplicar las recetas de Pepiño, las mismas que fracasaron antaño, acabaron con la prosperidad y amenzanaron la libertad de tanto. Y la la oposición y otros diciendo que es importante que España esté ¿España? cuyo significado -discutido y discutible según él- desconoce, no, ZP no vaa representar España, quiere erigirse en el nuevo salvador extendiendo los tentáculo nocivos, perniciosos y severamente dañinos del intervencionismo izquierdista tan siniestro y que tanto se padeció en el siglo pasado, que resurgió en Latinoamérica y que pretende volver a Europa incluso a la primera potencia mundial de la mano de ése que se sentaba al paso de su bandera. Por el bien del mundo, espero que ZP no acuda. ¡Hala, ya pueden por ello empezar a llamarme antipatriota igual que cuando lo que declárabamos que había una crisis que otros negaban éramos unos traidores indeseables de esa España a la que la izquierda no ha dejado de ultrajar! ¡El mundo al revés!

    Vade retro ZP

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  2. Muy buen artículo.

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