Seguimos sin aprender

Uno de los gestos más insultantes que recibimos los votantes del PP del zapaterismo fue la campaña de la ceja. Despreciaron nuestros valores y principios llamándonos tristes por no asumir su inconsciente alegría adolescente de negar la realidad. El manifiesto cejatero fue leído por Carmen Vela, una científica que ha pedido el voto para Rubalcaba en las elecciones del pasado 20 de noviembre. Así que el ministro de economía, Luis de Guindos, la ha relevado como miembro del consejo asesor para la ciencia y la tecnología, pero no para mandarla de vuelta a Ingenasa, sino para nombrarla secretaria de estado. ¿Para esto nos pidieron la mayoría absoluta?

Igual alguno se cree que así va a evitar que Almodovar le llame asesino. Pues lo lleva claro, ni por esto ni por haberle respetado su SICAV, en las medidas socialdemócratas realizadas por el gobierno la pasada semana.

Aunque lo peor es que ella acepte. Mucho Rubalcaba es el mejor, Zapatero es la alegría de España pero es darle un carguito los tristes del PP y lanzarse en plancha a por él. No, si estos progres como no creen en dios, les da igual vender su alma.

En este caso yo me pregunto, ¿no había nadie ideológicamente cercano al PP que sirviese para la secretaria de estado de investigación, desarrollo e innovación? ¿O se han creído esa bobada de que la progresía es la modernidad y en la innovación necesitan un progre? ¿Nadie se ha parado a pensar como nos sentaría este nombramiento a los 10.830.693 votantes del PP en las generales? ¿O es que les da igual lo que pensemos?

En fin, que solo nos queda pedir a la virgen, en mi caso a la de los Remedios, que pase pronto este año 2012 y que en la crisis de gobierno terminen de salir todos los socialistas del gobierno, que con los nueve años de Zapatero, siete de gobierno y dos de pancarta, ya hemos tenido bastante. Vamos, digo yo.